Por Cristian Gracia Palomo,
Área de Formación y Cultura del Consejo Ciudadano Municipal de Podemos Málaga
La hipótesis Podemos giraba en torno a la idea de alcanzar el poder (o la suficiente cuota de poder) para iniciar un proceso de cambio en nuestro país. Se planteaba como un blitz, un golpe relámpago, que pillara a los adversarios desprevenidos. La idea era crear una máquina de guerra electoral en forma de partido político y que sólo prestara atención al objetivo electoral. Ser partisanos con el único fin de alcanzar las instituciones con suficiente capital electoral.
Sin embargo los resultados del 26 de julio y la composición del Congreso y el Senado desdibujan esta posibilidad. Si bien toca felicitarse por el resultado (5 millones de votos y 71 escaños en sólo dos años de vida), dejan un regusto amargo. El Partido Popular crece y no fuimos capaces de figurar como la segunda fuerza. Sabemos que el cambio político en nuestro país se dará tarde o temprano, pero tendrá que esperar un poco más.
Este es un nuevo escenario complejo, en principio poco estable, pero que aleja a Podemos de esas cuotas de poder que decíamos antes. La nueva composición del congreso, con mayoría de fuerzas conservadoras (como quedó patente en el pacto por la presidencia de la Cámara) plantea un escenario poco halagüeño.
La hipótesis del golpe de mano queda descartada. El nuevo espacio que se abre tiene que ser necesariamente a largo plazo, con un nuevo ciclo tremendamente politizado (en el que se prevé el regreso de las grandes movilizaciones), pero con otros ritmos. Desde Podemos tenemos la responsabilidad de comenzar a organizar de forma adecuada el partido, así como de generar una democracia más profunda. Si bien son necesarios otros elementos de carácter organizativo, para alcanzar un grado adecuado de democracia es necesario que haya niveles apropiados de formación y conocimiento entre la militancia. De no ser así las grandes decisiones se dejan en manos de los técnicos que "conocen" del tema y se eluden los debates que enriquecen y fortalecen a cualquier organización con la excusa de los tiempos.
En recuerdo de las misiones pedagógicas y el tren de la cultura.
Por otro lado la necesidad de formar cuadros se muestra imperiosa. Si bien Podemos absorberá a algunos de los cuadros del viejo régimen dispuestos a hacer las cosas de una forma diferente, tenemos que generar nuestros propios recursos humanos. Necesitamos gente capaz de leer o redactar leyes, llevar a cabo una negociación, conocer de sistemas electorales o hacerles buenos oradores y comunicadores. Necesitamos que no sean siempre los mismos quienes hacen siempre todas las tareas, muchas veces porque son los únicos que saben. Necesitamos crear recambios que no sólo sean igual de buenos, sino mejores.
Para que nadie sea imprescindible y todos seamos necesarios y útiles.
Desde el Área de Formación y Cultura del Consejo Ciudadano de Podemos Málaga tenemos esto claro. Una vez acabadas las elecciones, se volvió a convocar el área. El trabajo ha sido intenso y ya se empiezan a ver resultados concretos.
Todavía estamos en una primera fase. Hasta ahora hemos visitado 2 de los 11 círculos territoriales (Distrito 4 y 2). Nos hemos puesto como fecha tope para visitarlos todo los primeros días de Agosto. Terminado este proceso de explicar y recoger ideas, comenzará otro en el que pondremos en común todas las propuestas recibidas y verá la luz un documento definitivo (o todo lo definitivo que puede ser un documento de esta índole). Sobre este trabajo el Área de Formación y Cultura continuará su camino.
Comienza un periodo fascinante para consolidar el partido, hacer territorio y crecer en todos los niveles. Un periodo que sólo llegará a buen puerto con debates honestos, cuidados y confianza en los compas. Un camino que merece la pena que recorramos juntos.
¡Seguimos! ¡SI SE PUEDE!
Os dejamos aquí el Documento Marco que están debatiendo los Círculos.
DOCUMENTO MARCO
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